Demi Lovato acaba de lanzar su propio vibrador Demi Wand, pero es tan solo la última en unirse a una creciente lista de famosos que venden sus propios productos eróticos. Ahí van todos, para que elijas el que más te gusta.

Lily Allen

La cantante se asoció a principios de este año con Womanizer para lanzar una edición limitada de un estimulador clitorial llamado Liberty. Gracias a su tecnología Pleasure-Air, Liberty masajea y succiona simultáneamente, y puedes elegir entre seis intensidades. Además de hipoalergénico, se ofrece en varios colores, se carga fácilmente por medio de un puerto USB, y gracias a su reducido tamaño y elegante diseño se puede llevar en el bolso. Lily Allen se había declarado previamente fan incondicional de la marca, por lo que para ella fue todo una experiencia participar en el diseño de Liberty.
Tal y como afirma la cantante “Los juguetes sexuales siguen siendo tabú. El propio placer femenino sigue siendo tabú. La única manera de que los temas dejen de ser tabú es hablar de ellos de manera abierta y frecuentemente, sin vergüenza ni sentimientos de culpabilidad.” Liberty de Lily Allen fue trending topic en Twitter cuando se lanzó, y actualmente es todo un éxito de ventas

Dakota Johnson

La actriz de 50 Sombras de Grey es desde hace un año la socia y CoDirectora Creativa de Maude, una marca que defiende la sexualidad como parte esencial del wellness. “La concienciación sexual es un derecho humano básico. Defiendo fervientemente la filosofía de Maude, y es simbiótica con mis profundas creencias respecto a la salud sexual. Además, la calidad y la estética de estos productos es excelente, y me encantan.” ha explicado Dakota Johnson en su cuenta de Instagram.
La hija de Melanie Griffith y Don Johnson está emocionada con su cargo en Maude “Espero poder integrar en la empresa iniciativas basadas en la sostenibilidad y la educación, a la vez que ofrezcamos productos de wellness sexual preciosos y de calidad, accesibles a todos los humanos. ¡Disfruta! Con Amor y Placer, Dakota.” Desde luego, si alguien sabe del placer sexual, es Anastasia.

Gwyneth Paltrow

¿Quién no se acuerda de la vela «Con Olor a Mi Vagina» de Gwyneth Paltrow? Por medio de Goop, la actriz siempre rompe barreras en temas de salud, belleza y sexualidad, por lo que este San Valentín se recibió con gran entusiasmo el lanzamiento de su Double-Sided Wand. El primer vibrador que Goop lanza al mercado tiene dos puntas; una más gruesa para masajes externos, y otra más fina para una estimulación más definida. Cada una de las puntas tiene ocho modos diferentes de vibración con distintas intensidades. El juguete se puede usar en el agua a una profundidad de un metro y durante 30 minutos, por lo que es imposible que te aburras, aunque no que te ahogues.

A la venta en Goop, cuesta 95 dólares (84 euros). En cuestión de pocas horas del lanzamiento el producto se agotó, así como el Ultraplush Self-Heating G-Spot Vibrator, que se calienta mediante un botón, dando la sensación de estar en contacto con otra persona. Tiene distintas intensidades y modos de vibración con los que jugar. También a la venta en Goop, tiene un precio de 85 dólares (75 euros).

Cara Delavigne

La modelo, actriz y enóloga es la copropietaria y Consejera Creativa de Lora DiCarlo, una empresa de juguetes eróticos para mujeres. “La visión de Lori DiCarlo representa casi todo lo que apoyo: un placer liderado por las mujeres, enfocados en la femme e inclusivo. Estoy tan emocionada de convertirme en copropietaria y Consejera Creativa, y contribuir de manera creativa a Lora y a su equipo. Sus productos han ganado varios premios, y están redefiniendo cómo las personas exploran, experimentan y se responsabilizan de su placer.”
El modelo favorito de la actriz y modelo es Baci, un estimulador clitorial, y lo recomienda para aquellas que se inician en el tema de los juguetes sexuales. “No tengas miedo de hacer preguntas” anima Cara Delevingne “Mantén tus opciones abiertas y sé consciente de que la exploración sexual no es una cosa de una sola vez; es un viaje.”.

En noviembre Demi Lovato anunciaba el lanzamiento de su vibrador Demi Wand. Diseñado por Demi en colaboración con Bellesa Boutique, es un vibrador inalámbrico de última tecnología. Con ocho velocidades, un cuello flexible y 100% impermeable, es sedoso al tacto y está elaborado con silicona no porosa. Disponible en dos colores, el pequeño y silencioso vibrador se carga en la propia funda en la que se guarda, por medio de un puerto USB.

Mötley Crüe​

El grupo se asoció en 2016 con LoveHoney para lanzar su Official Mötley Crüe Collection. Compuesta por ocho potentes vibrados mini y de tamaño medio, lo más curioso de la colección es que los vibradores estaban decorados con dibujos y letras de las portadas de sus álbumes y canciones. Para fans hardcore, lamentablemente ya no se venden.

50 Cent

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En 2008 el rapero lanzó su marca de condones Magic Stick (“palo mágico” qué poca imaginación) en honor a su canción del mismo título, pero el público nunca llegó a catar los profilácticos porque, según alegó el rapero “quería cosas en los condones que no funcionarían”…¿?¿ También jugó con la idea de lanzar juguetes modelados sobre su propio pene, pero hasta a él le pareció una mala idea y el proyecto nunca llegó a ver la luz del día.

Lady Gaga

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Para normalizar que mujeres compren y lleven condones encima, en 2010 la reina del pop lanzó su propia colección en colaboración con Proper Attire. De llamativos naranja, verde y rosa Lady Gaga explicó en el lanzamiento del producto que “No es complicado, es ir a la moda.” Aunque parece frívolo, el 100% de las ganancias se destinaban a Planned Parenthood, una ONG que ofrece servicios de planificación familiar, exámenes médicos y abortos.

Dave Stewart

El cantante de Eurythmics lanzó en 2009 un vibrador llamado Little Steel Tonight, diseñado en colaboración con la marca de juguetes para adultos JimmyJane. El juguetito estaba elaborado con acero, lucía impresa la letra de su canción Let´s Do It Again y tenía 28 diamantes incrustados en la punta -poco cómodo-. Little Steel Tonight estaba diseñado para llevarse colgado del cuello junto a una púa de guitarra, lo cual no parece muy higiénico, pero al modesto precio de 1000 libras (883 euros) que costaba, bien había que lucirlo. Ahí lo dejamos.